10 razones por las que lo mejor que le puedes regalar a tu hijo es un puzzle

La puzzlemanía es una afición que está muy extendida, mucho más de lo que parece. Los puzzles para niños, al igual que los destinados a los adultos, pueden llegar a ser realmente adictivos y entretenidos. Y, por lo tanto, un regalo fenomenal.

 

El gran atractivo de los puzzles para niños y adultos

Los no iniciados en este mundo probablemente no son conscientes de la amplísima variedad de puzzles que existen. Junto con los puzzles de toda la vida (que pueden ser de madera, de metal, plástico, cartón, gomaespuma etc.) conviven los innovadores de tres dimensiones, y también, mucho más recientemente, los de cuatro dimensiones.

Precisamente esta variedad es una de las razones por las que los puzzles son un excelente regalo para niños. No solo hay infinidad de puzzles apropiados para cada franja de edad, sino también de cualquier temática. A tus hijos les encantará pasar las horas reconstruyendo a sus personajes favoritos en un rompe cabezas con una dificultad medida especialmente para ellos.

 

Razones por las que los puzzles para niños son un excelente regalo

Los puzzles sirven para combatir la ansiedad

¿Sabías que muchas personas se enganchan a los puzzles en épocas malas de su vida, como tras una ruptura o al dejar de fumar, etc.? Los puzzles son una excelente forma de enfocar la atención y combatir el nerviosismo y la ansiedad. Si tus hijos son especialmente movidos o les cuesta prestar atención, los rompecabezas serán una gran ayuda para ellos.

 

Los puzzles aportan numerosos beneficios en el aprendizaje.

Capacidad de resolver problemas, elaborar estrategias y seguirlas, coordinación, habilidades espaciales y visuales… los beneficios de los puzzles han sido registrados en numerosos estudios y son especialmente importantes durante las fases tempranas del aprendizaje.

 

Son una alternativa a las pantallas.

Seguro que tus hijos pasan muchas horas delante de una pantalla, ¿verdad? Los smartphones y videojuegos, por no mencionar la televisión, se han convertido en una de las principales opciones de entretenimiento. Y no hay nada de malo en ello, por supuesto, pero no pueden ser la única. Los puzzles pueden ser un excelente candidato para entretener a tus hijos.

 

Los puzzles son divertidos en solitario y en grupo.

Tus hijos no tienen por qué hacer puzzles solos, por supuesto. De hecho, los puzzles son una excelente forma de pasar tiempo con ellos haciendo algo divertido, un juego tranquilo que implica perseguir objetivos comunes y organizarse. Entretenimiento, socialización y aprendizaje, ¡todo en uno!

 

Genera una afición y refuerza el afán de superación.

La dificultad de los puzzles reside, sobre todo, en su tamaño. Puedes empezar por regalarle un puzzle pequeño, y a partir de ahí ir aumentando la complejidad. Si tu hijo se aficiona, se sentirá realizado al ver que va consiguiendo superar retos cada vez mayores.

 

Los puzzles ayudan a favorecer la reflexión en cadena.

Un rompecabezas exige extraer conclusiones generales a partir de un pequeño fragmento de información, y también el proceso contrario. Con ellos, los niños pequeños aprenden a identificar y desarrollar cadenas de razonamiento.

 

Los puzzles enseñan tolerancia a la frustración.

Otra habilidad que es muy útil para los niños pequeños. Los puzzles no siempre salen bien a la primera, y muchas veces sucede que el camino que creíamos correcto en realidad es erróneo. Así, los niños pequeños aprenderán que las cosas no siempre se consiguen a la primera, y que alcanzar el éxito requiere esfuerzo y determinación.

 

Los puzzles ayudan a prevenir enfermedades.

Hay estudios que demuestran que la afición a los puzzles, practicada desde la niñez, mejora la salud mental general y ayuda a prevenir enfermedades como el Alzheimer y la demencia.

 

Los puzzles potencian la imaginación y la creatividad.

Imaginar cuál es la imagen del puzzle, buscar nuevas formas de organizarse para construirla… todo ello favorece el desarrollo de la imaginación y la capacidad creativa de los niños. No olvidemos que el puzzle se monta, en primer lugar, en la cabeza.

 

Los puzzles pueden ser realmente divertidos.

¡Y esta es una de las razones más importantes, por supuesto! Más allá de sus numerosos beneficios, que nunca hay que olvidar, los rompecabezas son una afición genial y entretenida que hará que se les pasen las tardes volando. ¡Pruébalo!

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